Con la llegada del calor uno va buscando actividades que permitan descargar esa adrenalina y estrés que normalmente dejamos en el gimnasio pero de una forma más «fresquita», yo no se ustedes… pero yo soy incapaz de estar «vuelta y vuelta» en la playa, así que siempre ando inventando algo para entretenerme. Si teneis la suerte de vivir o veranear en la costa, teneis que provar esta modalidad que os traemos hoy… El SUP (Stand Up Paddle).
A veces algunas prácticas deportivas o sociales no se dan a conocer al gran público hasta que algún famoso de turno las practica. Algo parecido ha sucedido con el Stand Up Paddle (SUP), un deporte originario de Hawai y la Polinesia, y que se ha puesto de moda en el último año gracias a que lo practican algunas celebrities estadounidenses. En España fue introducido el verano pasado por las chicas Roxy, capitaneadas por las gemelas canarias, Daida e Iballa Ruano, varias veces campeonas del mundo de windsurf.
Su origen documentado se sitúa en las playas de Waikiki, en los años 60, allí los monitores de surf usaban unas grandes tablas con remos de canoas, desde las que tomaban fotografías a los turistas que estaban aprendiendo. Con el comienzo del nuevo siglo los propios surfistas hawaianos adaptaron esta costumbre a su entrenamiento para los días sin olas cuando no podían entrenar. Actualmente existen torneos específicos para esta nueva modalidad deportiva incluso en Europa.
El SUP se puede practicar en cualquier medio acuático como ríos o lagos, ya que no necesita de olas. Además resulta mucho más sencillo en su aprendizaje por lo que es accesible para casi todo tipo de personas con ganas de intentarlo, su mayor reto es mantener el equilibrio y remar. Existen diferentes modalidades, desde las más tranquilas como tomar el sol o realizar ejercicios de estiramiento, hasta travesías, circuitos o giros. Incluso algunos usuarios se atreven a subir a sus mascotas a las tablas. Por ello estas han ido evolucionando según las modalidades:
– SUP allaround. Tablas de entre 3 y 3,5 metros. Son más estables y permiten surfear en pequeñas olas o dar largos paseos marítimos, en ríos, lagos, etc.
– SUP surf. Son tablas de entre 1,5 y 3 metros. Se utilizan remos de carbono que permiten realizar un surf agresivo, ya que no sólo sirven para propulsarse y coger las olas sino también para hacer giros y otras maniobras.
– SUP race. Las medidas de las tablas tienen como mínimo 3 metros y lo que la imaginación permita. Se utilizan remos también de carbono, pero con las palas más grandes. La capacidad de entrenamiento es mayor, porque la tabla presenta más inestabilidad. En competición, existen los trayectos cortos, sprints o carreras de larga distancia o ultradistancia.
– SUP de aguas bravas. Son tablas más especializadas. Por su dificultad de control y peligrosidad es la disciplina menos practicada.
– SUP dowwind. Se utilizan también tablas superiores a 3 metros. Para situaciones con olas en alta mar, se hacen recorridos con el viento de espalda, intercalando sprint con surfeadas en alta mar. Es bastante técnico.
Uno de los principales atractivos son las vistas poco frecuentes que permite. Por nuestra posición erguida estaremos a mayor altura que en cualquier otro artilugio acuático, además podremos disfrutar al mismo tiempo tanto del fondo marino como de las vistas de la costa.
Hoy en día muchas escuelas y agencias de deportes de agua incluyen al SUP entre sus servicios, no obstante se trata del deporte acuático con mayor crecimiento del mundo.
Autor: M.Quintanilla
Via: Parasaber.com