Hoy vamos a hacer especial incapié y al mismo tiempo una reflexión sobre el entrenamiento del «CORE» y la funcionalidad e importancia de tener un cinturon abdominal correctamente entrenado y formado.
Como sabemos, los músculos abdominales tienen entre sus principales funciones:
- Dar forma al talle, manteniendo las vísceras en su posición, oponiéndose a la gravedad.
- Forman la prensa abdominal, relacionada con la defecación, la micción, el parto, el vómito y en general la emunción (vaciado) del contenido de las vísceras abdominales y pelvianas.
- Participan en la espiración mediante el descenso de las costillas y la disminución del orificio inferior del tórax.
- La movilización del tronco: produciendo la flexión sagital, rotación y lateralización (flexión lateral) del tronco.
- La estabilización del tronco. La contracción simultánea de los músculos del abdomen incrementa la presión intra-abdominal y la rigidez del tronco, fijando o estabilizando los distintos segmentos que forman el raquis. De este modo se protege a la columna de posibles lesiones producidas por movimientos bruscos, empujones, caídas, resbalones, etc. Esta es una de las funciones más y cuestión será tratada más ampliamente en el presente artículo.
Así pues como podemos observar, a diferencia de los músculos de las extremidades, los músculos del tronco realizan una variedad de funciones homeostáticas, además del movimiento y control del tronco, como la respiración y la incontinencia. Respecto a la función óptima del tronco consiste en una interacción compleja entre el movimiento de la integridad de la columna vertebral y la pelvis a nivel intersegmentario y la contribución del tronco en el mantenimiento del equilibrio corporal respecto de la gravedad y otras fuerzas externas.
De esta manera, debemos concebir el entrenamiento lumbo-abdominal (CORE), como base fundamental de los programas de entrenamiento saludable, puesto que es el núcleo o eje central de la cadena cinética funcional y una adecuada capacidad de estabilización raquídea será necesaria para poder realizar tareas de manera eficaz y con el menor riesgo de lesión.
Si a ello consideramos que el dolor lumbar es un importante problema de Salud Pública y suele ser una de las principales causas de limitación funcional y bajas laborales, nos encontramos ante la necesidad de ser escrupulosamente rigurosos a la hora de garantizar los factores de eficacia y, sobre todo de seguridad, minimizando al máximo el riesgo y potenciando el beneficio.
Si se consideran los Centros de Fitness, los lugares donde se trabaja y vela por la salud y funcionalidad de los individuos, es curioso observar como en el mismo no se atienden a aspectos básicos de higiene postural que si son considerados por otros campos o áreas como la ergonomía o medicina del trabajo. De hecho, debe considerarse que uno de los principales indicadores del nivel de salud es el estado en el que se encuentra el raquis, ya no sólo a nivel de capacidad de movimiento y de generación de fuerza sino también por la ausencia de molestias.
Autor: Ruth cohen
Via: RuthCohen.es